LDN
Moverse con libertad
¿Te acuerdas de todas las cosas divertidas que hacías antes de tener hijos? Tardes enteras de exposiciones, compras, cafés al sol y siestas en el parque. No te has vuelto un muermo solo por tener un hijo, así que reconquista la ciudad con el Quinny LDN. Gracias a su ligereza y al plegado fácil con una sola mano, te da libertad para montarte en el metro, encontrar un nuevo atajo o simplemente dejarte llevar por la ciudad. Además, el amplio asiento permite que el Quinny LDN siga valiendo perfectamente a medida que el peque crece, garantizando su comodidad cuando supera la temida línea de los dos años y después.